miércoles, 2 de marzo de 2011

¿Cuál fue la primera película en 3D?

3d-nazi
El director australiano Philippe Mora ha descubierto películas en un archivo federal alemán filmadas con un primitivo sistema tridimensional que datan de la época del Tercer Reich. Según Mora, es en Alemania y no en Hollywood donde se creó el 3D. De acuerdo con el cineasta, en los viejos archivos cinematográficos de la capital alemana -donde buscaba material para su próximo trabajo, el documental Cómo se grabó el Tercer Reich- encontró dos películas que llevaban unos 70 años olvidadas. Se trata de cintas de 30 minutos cada una que fueron filmadas como piezas de la enorme maquinaria propagandística nazi que dirigía Joseph Goebbels. Dos películas que, según el cineasta australiano, esbozan los primeros intentos de rodar cine en tres dimensiones.

"Las películas están grabadas en cinta de 35 milímetros. Parece que están hechas con dos lentes frente a las que habrían colocado un prisma. Las produjo uno de los estudios independientes alemanes, por orden del Ministerio de Propaganda de Goebbels", afirma.

Las películas, "de una enorme calidad para la época" y que fueron etiquedadas como raum films, es decir, películas del espacio, se titulan Seis chicas se zambullen en el fin de semana y Tan real que puedes tocarlo.


Desde mediados de los años noventa, acorde con una directiva europea, una normativa obliga en España a informar a los consumidores sobre la eficiencia energética de los diferentes electrodomésticos. La "etiqueta verde" informativa es común en aparatos de gran consumo, como frigoríficos, lavadoras, secadoras o lavavajillas. También en las lámparas de bajo consumo y en los fluorescentes. Este etiquetado es fundamental porque indica a los usuarios cuál es el consumo del aparato y posibilita escoger entre diferentes electrodomésticos a partir de este dato.


A partir del 30 de noviembre de este año, los fabricantes deben añadir una nueva etiqueta energética a los televisores que comercialicen en la Unión Europea. Algunos, como Sharp, ya han empezado a hacerlo. Esta etiqueta deberá proporcionar a los consumidores una información adicional detallada sobre el gasto energético del televisor. Además, de igual modo que en los electrodomésticos, la clasificación energética está basada en un estándar de medición común, lo que posibilita que los consumidores puedan comparar entre varias marcas.

De esta forma, la resolución de pantalla o sus dimensiones ya no serán las únicas variables que podrán tener en cuenta los consumidores, lo que permitirá hacer una elección con mejor información que hasta ahora. Los usuarios pueden conocer cuáles son los electrodomésticos y equipos con menor consumo energético mediante el uso de algunas herramientas de consulta on line, como la página web Eurotopten.es, realizada por algunas ONG internacionales.

Energy Star, por una electrónica verde

Sin embargo, en los productos electrónicos, este etiquetado estándar no se aplica en la actualidad, aunque sí otras iniciativas para controlar el gasto energético en estos dispositivos. Los fabricantes empiezan a desarrollar modelos más eficientes y, sobre todo, "gadgets verdes", es decir, que en su fabricación no precisan materiales y elementos contaminantes y están libres de sustancias químicas peligrosas para el medio ambiente, que se puedan desprender en los desguaces y vertederos.


En Estados Unidos, desde mediados de los noventa, la Agencia de Protección del Medio Ambiente de este país promueve el programaEnergy Star, conocido por los usuarios de informática debido a que es habitual su logotipo en la carcasa del ordenador. Éste cuenta con él en el sistema de arranque, lo que se conoce como BIOS (acrónimo de "Basic Input/Output System").

Energy Star busca aumentar la eficiencia energética de los ordenadores y reducir los gases causantes del efecto invernadero. Además, ha servido para que el concepto de tecnología verde o "green computing" se haya desarrollado en los últimos años como una forma eficiente de minimizar el impacto ecológico de las nuevas tecnologías en el mundo. En la actualidad, el "green computing" se utiliza de forma masiva en centros de datos de todo el mundo, debido al ahorro de costes que supone en la factura eléctrica. Google, con centros de datos con millones de ordenadores, es una de las compañías que más utiliza estos principios para ser más eficiente energéticamente.

En la actualidad, más de 27.000 productos comercializados en la Unión Europea cumplen con las especificaciones de Energy Star

El programa Energy Star también está presente en Europa, con requisitos sobre eficiencia energética que los productos de electrónica de consumo deben cumplir para poder ser participantes del mismo. En la actualidad, más de 27.000 productos comercializados en la Unión Europea cumplen con las especificaciones de Energy Star.

Sostenibilidad en los productos de electrónica de consumo

Durante 2011, las principales firmas del sector utilizarán un 100% de materiales reciclables en los embalajes

El pasado mes de enero, la asociación norteamericana CEA (Consumer Electronics Association) publicó su informe anual sobre sostenibilidad en productos de electrónica. Entre otros aspectos, destaca algunas cifras sobre tendencias en la industria, como un crecimiento sostenido en la fabricación de productos con un menor impacto medioambiental.

También se recogen algunas iniciativas, como la de un fabricante que cambió el diseño de sus envases para que fueran reciclables y reducir así las emisiones de CO2. Por otra parte, muchos fabricantes de electrónica han comenzado a utilizar materiales reciclables y un menor uso de cartón y papel para los envases. El estudio concluye que durante 2011 las principales firmas del sector utilizarán un 100% de materiales reciclables en los embalajes de productos de electrónica.

El CES quiere pensar en verde

En la reciente feria CES de Las Vegas, el mayor escaparate de aparatos tecnológicos para el hogar del mundo, algunas ONG como Greenpeace realizaron una encuesta sobre los productos electrónicos "más verdes" del mercado, en categorías como monitores, pantallas de televisión, ordenadores portátiles o smartphones.

El CES ha rubricado su apuesta por la tecnología limpia más que ningún otro año, con una sección oficial de productos "verdes" que destacan por su bajo consumo, por su control de gasto en tintas o papel o bien por usar materiales limpios en su fabricación. En esta sección se han podido ver impresoras con sistemas de racionamiento de tintas, como las de la gama Fujitsu, sistemas de ahorro y reciclado de papel de impresión.LG ha presentado un televisor de iluminación Super LED, que ahorra un 25% de energía respecto a los convencionales y, al parecer, no pierde calidad de imagen. Panasonic ha dedicado parte de su stand a un modelo de casa verde regulada con inteligencia electrónica. Comprende luces LED, recarga solar, pilas de combustible y un entorno gráfico para gestionar su funcionamiento.Algunas empresas que buscan soluciones ecológicas al consumo han llevado a Las Vegas propuestas como enchufes que se recargan con la luz solar y dan luego esta energía o que controlan las pérdidas por calor. La empresa nPower ha presentado el cargador cinético PEG, que se carga eléctricamente con el movimiento y luego puede pasar la energía a diferentes baterías. Podría llevarse en las mochilas por los estudiantes, que luego aprovecharían la carga para sus smartphones.

Las compañías de telecomunicaciones también apuestan por el control inalámbrico de la energía en los hogares

Las compañías de telecomunicaciones, como Verizon, también apuestan por el control de energía en los hogares, con tecnologías inalámbricas que permitan crear una red que centralice en remoto la gestión de los diferentes aparatos que haya encendidos, o en recarga, en una casa, luces incluidas. Verizon se basa en el protocolo Z-Wave, que trabaja en una frecuencia especial que no interfiere los dispositivos inalámbricos domésticos y permite su encendido o apagado en remoto desde un mando central.

Proyecto Centibots, investigación en robótica más allá del uso militar

centibotsEl proyecto Centibots se desarrollo a lo largo del año 2004 y tenía como objetivo desarrollar robots que pudieran llevar a cabo labores de vigilancia, dentro del propósito de la Agencia americana DARPA de demostrar que se podían implementar este tipo de arquitecturas informáticas colaborativas en muy poco tiempo. Uno de sus máximos exponentes, Enrique Ruspini, nos explica cómo desarrollaron el proyecto y cómo pueden afectar las investigaciones en este campo a nuestra vida diaria.